Page 7 - Revista del Repuesto Automotor - Edición 82

Transporte público: el primer gran paso

Hoy es un hecho que el transporte público en la capital ha
comenzado un camino sin retorno a la electromovilidad. Lejos del
panorama vivido en el año 2007 con la llegada del Transantiago
en 2018 un total de 200 buses eléctricos arribaron al país para
reemplazar los recorridos del criticado sistema de transporte AVANCES 2019
existente.
La empresa china BYD (Build Your Dreams) entregaba para
ese entonces 100 máquinas de 12 metros de largo con una
capacidad para 81 pasajeros, aire acondicionado y puertos USB
que causaron gran empatía en los usuarios del popular recorrido
519 Peñalolén - Santiago, el primero de esta clase.
Los otros 100 ejemplares eléctricos llegaron de la mano de
los buses Yutong, otros chinos gigantes en la industria, con una
autonomía entre los 280 y 320 kilómetros, según el uso que
se haga del aire acondicionado y las mismas características en
confort.
Asimismo, se estrenaba el primer electroterminal en Peñalolén,
infraestructura que acoge puntos de carga para buses eléctricos
y estacionamientos solares que a través de paneles fotovoltaicos
generan energía para los consumos pequeños, mantenimiento
de los buses, compresores e iluminación del recinto.
A esta revolución se sumaron 490 buses Euro VI, que a pesar de
no ser totalmente eléctricos, tienen un sistema de alta tecnología
que disminuye considerablemente la contaminación ya que
cuentan con motorización fabricada en Alemania que se acoge
a la homologación Euro 6, un 90% menos contaminante que los
Euro 3 que deben salir de circulación. A modo de ejemplo, 100
buses de los nuevos contaminan menos que 10 de los salientes.
Ensamblados en Brasil, 416 unidades corresponden al modelo
chasis Mercedes-Benz O 500 U y 74 al chasis Mercedes-Benz O
500 UA. De éstos, 150 fueron adquiridos por el operador Buses
Vule con carrocería Caio, mientras las unidades restantes, con
carrocería MarcoPolo, fueron compradas por los operadores
Metbus, STP y Redbus Urbano.
La última puesta en marcha es la versión de dos pisos, cuenta
con aire acondicionado, tiene capacidad para transportar 102
pasajeros (63 sentados y 39 de pie), y el chofer tiene acceso a
dos pantallas que muestran los paraderos y las imágenes de las
cámaras que se encuentran al interior del bus. De esta manera
la energía limpia, la comodidad y las bajas o nulas emisiones
se sentaron en el sector público de Santiago para no volver a
pararse.

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