Recientemente CAREP se reunió con la diputada Ximena Ossandón para conocer el trasfondo el Boletín N°14.924-25, de la Cámara de Diputados, que busca modificar el proyecto de ley destinado a la regulación de las Desarmadurías de Vehículos Automotores.
La modificación fue presentada el año pasado por la parlamentaria y aún no ven avances. Sin embargo, la alta tasa delictual de robos de autos y de partes, piezas y repuestos “por encargo”, podrían impulsar la tramitación de esta importante normativa que permitiría regularizar este tipo de negocios.
Revista de Repuesto Automotor entrevistó a la parlamentaria para conocer el origen del Proyecto y analizar el propósito de investigación que la impulsó a desarrollar esta modificación.
“Mi principal motivación nace por ser representante de un distrito donde dos de las comunas que represento, Puente Alto y La Florida, figuran entre las 10 donde más se suceden estos delitos. Delitos que hay que entender desde su génesis, y ésta es normalizar la cultura del hampa entre la juventud, la deserción escolar y el consumo problemático de drogas”, señala la diputada.
Para la parlamentaria, “cada vez son más los menores que están participando en delitos violentos contra vehículos en movimiento, el principal aliciente en ellos no es un robo por necesidad de alimentación, ni por salir de una pobreza extrema, es el estatus dentro del grupo o piño como le llaman, la plata fácil que generan estos robos, que por auto llegan a ganar hasta $500 mil pesos por cada delincuente involucrado. Además de publicar los robos en redes sociales y generar una suerte de “ficha” delictual con su entorno. Ésta es la suerte de ganancia no económica, pero sí de rango entre los grupos delictivos”.
¿Cuál sería la razón, a su juicio, que este tema tan relevante, no haya sido materia de preocupación de parte de las autoridades?
“Siento que hay una suerte de tranquilidad en las autoridades, pensando que al realizar una ley para un caso puntual, como la ley por venta de vehículos robados se acabarán los portonazos y los abordazos. Y acá es donde tenemos que poner un poco más de calle a los proyectos que presentamos. Los autos robados no solo son objeto de venta, clonación y exportación para el extranjero, también tenemos el robo por encargo para piezas y repuestos que cada vez tiene más demanda en nuestro país, es cosa de revisar redes sociales y ver la demanda que existe por este tipo de repuestos. Como caso personal, a uno de mis asesores le robaron dos de sus ruedas afuera de mi oficina distrital, y las logró recuperar en conjunto con Carabineros de Chile, por una publicación en una red social de ventas”.
En otros países se ha llevado adelante esta regulación controlada para evitar tener un mercado ilegal para las partes y piezas de vehículos en desarme. Al consultar respecto a estos antecedentes, la diputada Ossandón señala que “en Argentina ha funcionado bastante bien, incluso la persecución de estas mafias les ha ayudado en la captura de tráfico de otros ilícitos, como drogas y trata de personas”.
Cualquier regulación en el mercado de las desarmadurías va destinado a proteger a los compradores de caer en sanciones legales, por ello, la parlamentaria es enfática en señalar que “es ideal una campaña fuerte de información, más la fiscalización de las autoridades tanto a los vehículos, como a las desarmadurías, y claro, el avance de este tipo de leyes que buscan debilitar a las bandas organizadas que atormentan a miles de personas”.
¿Qué pasos aún deben seguirse en el proyecto de ley? ¿En cuánto tiempo más se podría contar con una ley de regulación de las desarmadurías?
“Lo primero es discutir el proyecto y votar en general en la Comisión de Seguridad, luego discutir en particular recibiendo invitados, después se discute en sala, en el mejor de los casos se vota, y si nadie pone indicaciones pasa al Senado, donde hay un proceso parecido y luego pasa a la cámara de origen. Es imposible tener un margen de tiempo, solo se podría si el Gobierno le pone urgencia”.
Para avanzar, es indispensable la discusión desde el punto de vista de la seguridad y por ello, la diputada señala que “es indispensable la opinión de los gremios, y claramente serán llamados para involucrarse en este proyecto”.