Una buena revisión del vehículo antes de comenzar el trayecto es clave para evitar desperfectos durante el camino y un tránsito seguro.
Durante el verano, las carreteras del país experimentan un aumento significativo en el flujo vehicular debido al cambio de veraneantes. Por ello, es fundamental tomar las precauciones necesarias para garantizar un viaje seguro, tanto en la ida como en el regreso.
Una de las medidas clave es realizar una revisión completa del vehículo antes de iniciar el viaje, prestando especial atención a los siguientes aspectos:
Revisión de fluidos:
Es importante verificar niveles de aceite, líquido de frenos y anticongelante. Esta práctica ayuda a detectar posibles fugas y a prevenir fallas en el motor o en los sistemas de seguridad. Al realizar el cambio de aceite, es crucial usar el lubricante recomendado por el fabricante del vehículo, respetando tanto la viscosidad como las especificaciones técnicas.
Combustible:
Siempre es recomendable viajar con el estanque lleno. Además, confirme si el destino cuenta con estaciones de servicio cercanas. En caso contrario, cargue combustible en la última estación disponible antes de ingresar a zonas rurales o alejadas.
Sistema de refrigeración:
Verifique que el nivel de refrigerante sea el adecuado. Si necesita reponerlo y no cuenta con refrigerante, utilice agua destilada como alternativa temporal. Evite usar agua de la llave, ya que podría causar daños en el motor.
Frenos:
Inspeccione el estado de las pastillas y el líquido de frenos. Las pastillas suelen requerir reemplazo desde los 20.000 km, por lo que se recomienda revisarlas cada 10.000 km.
Amortiguadores:
Revise este componente cada 10.000 km en un servicio técnico autorizado. Asegúrese de que estén correctamente anclados y que no presenten daños en sus componentes.
Luces:
Compruebe que todas las luces del vehículo funcionen correctamente, incluyendo las altas, bajas, intermitentes y de freno.
Batería:
La vida útil de una batería generalmente varía entre 18 y 24 meses. Verifique que las conexiones estén limpias y firmemente aseguradas para evitar problemas durante el trayecto.
Adoptar estas precauciones no solo optimiza el desempeño del vehículo, sino que también contribuye a la seguridad de todos los ocupantes y otros conductores en la ruta. Planificar con anticipación y realizar estas revisiones hará que su viaje sea más seguro y placentero.