Por Alexis Cares, Director Al Torque
Una de las marcas de baja cilindrada favoritas en Chile es la india Bajaj, que este 2021 introdujo frescas novedades en su catálogo al ampliar la gama de su familia Dominar que comenzó con la urbana y naked 400 y que ahora coloca en vitrinas a la Dominar D250.
Durabilidad, economía de combustible, atractivo diseño y un fiable proceso de fabricación han sido parte de las razones del éxito comercial de este gigante asiático en decenas de mercados mundiales.
Por lo mismo, la que es la sexta marca de motos más vendida del país, afirma que el producto cuenta con la fórmula para revolucionar el mercado del “touring”, ya que coloca “a disposición de los usuarios un modelo versátil, con un motor menos potente y una muy competitiva relación calidad precio”.
La Dominar 250 posee atributos a considerar como iluminación LED completa, doble grupo de instrumentos digitales, asientos dividido, horquillas invertida, amortiguador trasero ajustable con precarga y escape de doble salida.
También sobresale por sus frenos confiados a un disco delantero de 300 mm, con pinza de montaje radial, y otro de 230 mm en la parte posterior. Ambos con tecnología ABS de doble canal. Desde Bajaj subrayan también la app “Bajaj Connect”, que facilita a sus clientes mantener actualizada la información de los periodos de garantía de su moto. También permite conectarse con el servicio mecánico, atención al cliente y saber dónde se encuentra el concesionario más cercano.
Mecánicamente es movida por un motor monocilíndrico DOHC de 4 válvulas de 248,77 cc. Está refrigerado por líquido y se basa en el Duke 250 de KTM, aunque el fabricante indio añadió su fórmula de doble chispa. La caja de cambios mecánica es de seis marchas. Da 26,6 caballos y un par de 23,5 Nm. Debe entregar una reacción bastante despierta ya que se sabe que acelera de 0 a 100 km/hora en 10,5 segundos y trepa a una velocidad máxima de 132 km/hora. Declara una distancia al suelo de 157 milímetros, lo que la vuelve amistosa para personas no muy altas.
Al tratarse de motos urbanos, su bajo peso da como resultante una alegre y hasta atlética respuesta en las aceleraciones, siendo ideal para vivirla en la urbe, aunque su potencia y motor la facultan absolutamente para recorrer autopistas y vías de alta velocidad. Ojo que al no tener carenado ni una protección frontal contra el choque del viento, puede ser incómodo sostener altas velocidades por espacios prolongados. Pero que nadie dude de chispa y performance vivaz.